Las inundaciones de 1983 en Amorebieta- Etxano dejaron una marca profunda en la historia del municipio. El desbordamiento del Ibaizabal y otros ríos provocó graves daños materiales, pero también impulsó la solidaridad comunitaria y mejoras en las infraestructuras que, hasta hoy, han evitado desastres similares.
Las inundaciones de Amorebieta-Etxano de 1983 fueron un desastre natural significativo, recordadas por su devastador impacto. Ocurrieron en agosto de ese año debido a lluvias torrenciales que provocaron que varios ríos, como
el Garitondo, el San Bartolomé y sobre todo el Ibaizabal, se desbordaran. Este desbordamiento causó graves daños en el municipio, en locales, tiendas, bares, empresas, portales, viviendas, y toda clase de infraestructuras, afectando intensamente el tejido social y económico. Murieron alrededor de 34 personas en toda Bizkaia.
Mucha gente recuerda aún la respuesta de la comunidad y el espíritu de solidaridad que surgió después del desastre. Además, estas inundaciones llevaron a una revisión y mejora de las infraestructuras para prevenir futuras catástrofes de este tipo en la región.
Y es que, sin ser tan devastadoras, Amorebieta sufría inundaciones con bastante frecuencia, afectando sobre todo a los negocios del centro. Cuando la lluvia persistía varios días, los zornotzarras vivían pendientes de las crecidas de los ríos y de su posible desbordamiento.
En el año 1998 se acometió una obra de gran calado para dar solución a este recurrente problema y desde entonces afortunadamente Amorebieta no ha vuelto a sufrir inundaciones, al menos de importancia. No obstante, el cambio climático está provocando situaciones no habituales y no se sabe lo que pasará en el futuro. Pero a día de hoy afortunadamente, nuestro querido Ibaizabal hace honor a su nombre y guía las aguas por su cauce a su paso por Amorebieta. Ura bere bidean!